Esta ruta la empezamos en el cruce del humilladero (cruce de
la carretera de Guadalupe-Navalvillar de Ibor-Villuercas) Y lo hacemos por una
pista que discurre paralela a la carretera que da acceso a la antigua base
militar. Una vez llegamos a una finca donde hay un caserío, el cual dejaremos a
la izquierda para iniciar una fuerte bajada donde nos encontramos con el mismo
camino que es utilizado para entubar el agua del famoso arca de Guadalupe.
Hasta el arca iremos cómodamente, a partir de la obra nombrada de interés cultural,
la ruta cambia.
Buscaremos una vereda oculta entre la maleza en dirección a
los hoyicios, enseguida volveremos nuestra vista a nuestra izquierda para observar
esta panorámica, el Guadalupejo
reteniendo sus aguas para abastecer de agua a los Guadalupenses y todo
su entorno. Si nos fijamos al fondo, veremos el palacio de Mirabel entre la vegetación.
No tardaremos en acercarnos a la ribera del río para
encontrarnos con restos de abandonadas majadas que un día dieron cobijo a las
cabras y pastores.
Dependiendo de la época en que lo visitemos, veremos brotar el agua del naciente del Guadalupejo mas abajo o mas arriba, incluso lo veremos aparecer y desparecer entre las rocas
Buscaremos los claros del bosque e incluso aprvecharemos las veredas de los ciervos para ir ganando altura sobre el margen derecho del río.
Vamos bordeando las parades rocosas que iremos dejando a nuetra derecha hasta encontrarnos con la cueva de los maragatos
(Cuenta la leyenda que unos fugitivos la utilizaban de
escondite y al tener que huir escondieron en la cueva un tesoro que aún no se
ha descubierto.)
Después de inspeccionar la cueva, le daremos larga a la vista
Volveremos por el mismo camino que nos ha traido hasta aquí.
Fin
No hay comentarios:
Publicar un comentario